En escasas páginas, Fernando Vérkell defiende desde un faro ermitaño el derecho a la soledad, a la nostalgia y al hechizo de las obsesiones. Sin arabescos vanguardistas, este libro es la reserva de un placer en solitario, donde la única garantía del lector será el encuentro con sus abandonos, con su suerte cíclica de faro, de isla, de árbol enjaulado.
Entrada libre
Acompañan: Susana Álvarez Pilona y Marcos Gutierrez
Sobre el libro:
«Existen dos formas de engañar al lector: flirteando con el mercado comercial para ser recompensados con dinero o escribir para grupúsculos que coloquen un apellido en negrilla en el panorama intelectual de un país marchito. El sendero del árbol enjaulado no abraza ninguno de estos dos engaños. En escasas páginas, Fernando Vérkell defiende desde un faro ermitaño el derecho a la soledad, a la nostalgia y al he¬chizo de las obsesiones.
Cada día pierdo otro día es lo que escribe en la bitácora el hombre del faro. Del mismo modo, cada día sin leer perdemos un día, una vida, muchas vidas.
Vérkell ofrece al lector complicidad con el tiempo y su paso de gigante. Sin arabescos vanguardistas, este libro es la reserva de un placer en solitario, donde la única garantía del lector será el encuentro con sus abandonos, con su suerte cíclica de faro, de isla, de árbol enjaulado».
Rubí Véliz Catalán
Fernando Vérkell
(Ciudad de Guatemala, 1989). Profesor. Estudió Letras en la Universidad de San Carlos de Guatemala –USAC–. En 2013, ganó el II Certamen de Ensayo de la Cátedra Miguel Ángel Asturias y al año siguiente publicó Nebulosa de un hombre que sueña, una colección de relatos. En 2015, fundó revistamandragora.com, una de las primeras revistas en línea enfocada en la difusión de literatura hispanoamericana. Fue columnista quincenal de Casi literal y colaborador en la sección Narrativas del medio madrileño Murray Magazine. Ha publicado textos narrativos en diferentes revistas hispanoamericanas. En 2018, Índole Editores incluyó dos microrrelatos suyos en la antología Tierra Breve. Es agnóstico, childfree, lector profesional y ciclista aficionado. Vive en Guatemala con Paula y dos peces.