Hace casi un año, SOPHOS publicó la traducción de un extraordinario libro: Desaparecida, la historia de Irma Flaquer. Desde entonces, esta investigación ha despertado un fuerte interés en el lector guatemalteco, más allá de la atención que ya había recibido antes la edición en inglés. Pero nos pareció oportuno compartir con nuestros lectores un comentario que Azucena Morán, lectora guatemalteca, le envió a la autora June Carolyn Erlick desde el otro lado del charco. Sabemos que son muchos los lectores que comparten esta opinión, y esperamos que al leerla, otros tantos quieran encontrar algunas respuestas a preguntas que se han planteado ya (o no).

Hola, June:

Estudio literatura y son innumerables las veces que he querido hablar con el escritor cuando termino de leer un libro. Describir el escalofrío que invadió mi cuerpo al voltear la última página. Y esta vez, ¡puedo!

Son casi las dos de la mañana en Italia y acabo de terminar de leer Desaparecida. ¡Y quiero decirle cuánto lo disfruté! Quedé fascinada por el personaje de Irma, por su coraje y su historia. ¡Y qué gran trabajo hizo describiendo a este, tan pequeño y tan distinto, país! Al pasar las páginas, reconocí tantas cosas que siguen sucediendo. A pesar de los miles de kilómetros de distancia, sentí a mi lado a cada clase social cuando relataba su historia, sus colores y sus diferencias. Leí las grandes contradicciones guatemaltecas en palabras simples y directas. ¡Usted realmente logró entender una gran parte de este país! Y lo más importante, encontró las palabras para decirlo. No había leído descripciones tan precisas y sencillas antes de esto. Necesitaba horas de tertulia para lograr describir los laberintos del país «abajo de México,» a personas que tal vez oían por primera vez la palabra: Guatemala.

¡Gracias! Ahora más personas a mi alrededor comienzan a entender.

Con cariño,

Azucena Morán