Descripción

Las personas cometemos errores en los textos que redactamos por varias razones. Entre ellas: tendemos a escribir como pensamos y hablamos; es decir, la escritura es un  reflejo automático, aunque no correcto, del pensamiento y del discurso. Otra razón es que carecemos del hábito sistemático de la lectura como pasatiempo. Se ha llegado a establecer que quien no lee sistemáticamente no llega a redactar bien.

Las personas nos hemos dejado influenciar por la aseveración: si el mensaje es captado y provoca una respuesta satisfactoria, no importa cómo se escriba ni cómo se envía. Esto puede ser un extremo; en el otro extremo del están los puristas del lenguaje, que promueven y defienden la redacción y ortografía en estricto apego a las reglas gramaticales y de la sintaxis.

Este taller se ubica en las opciones intermedias del continuo y pretende llenar ciertos objetivos prácticos. Está dirigido a asistentes administrativas, integrantes de equipos de trabajo en ambientes laborales, profesionales en puestos técnicos-operativos, mandos medios y de liderazgo gerencial.

Su objetivo central es que el participante reconozca y acepte sus errores comunes en la redacción, en particular, y en el uso del idioma español escrito en general. Al considerarlos y tomar plena conciencia de los mismos, desarrollar la experiencia necesaria para corregirlos con o sin ayuda de recursos adicionales. Con ello, ser mejores personas y profesionales.

Francisco Nieves

Humanista, educador, tecnólogo social; asesor-consultor en desarrollo humano y organizacional, investigador y conductor de encuentros, talleres y seminarios. Creador de varios materiales educativos. Utiliza una actitud proactiva y competencias propias del líder facilitador-mentor – entre las que destaca una comunicación efectiva basada en la asertividad, empatía y respeto – para provocar ambientes de trabajo en equipo con armonía.

Más de 40 años de experiencia en administración institucional y docencia en el nivel medio y universitario. Ha desarrollado destrezas y habilidades por arriba del promedio en el uso de un lenguaje efectivo, oral y escrito. Su vocación de servicio la utiliza para crear en las personas la necesidad de cambiar para mejorar.